La historia del cine está llena de buenas ideas jodidas por un mal director y de buenos directores que hacen lo que pueden con la historia que les ha tocado contar. Este segundo es el caso de Marc Forster y esta guerra mundial Z. Forster es un tipo solvente y de gran talento como demuestran algunos de sus títulos anteriores, (Descubriendo nunca jamás, Monster´s ball, Quantum of solace o mi favorita "Mas extraño que la ficción), que, en esta ocasión, y siguiendo con su tradición de hacer de todo y cuanto más diferente de lo anterior mejor, se hace cargo de una historia tan poco original como la de la busqueda de una solución para una pandemia que convierte a la gente en zombies. Infectados, que diría Enjuto Mojamouto.
Como ya digo la película no es nada original, salvo en la forma de evolucionar de los zombies en plan enjambre, que en ciertos pasajes como el asalto a los muros de Jerusalen, recuerda directamente a una manada de ratas rabiosas. La imagen mas espectacular de la película y la menos aprovechada.
El personaje de Brad Pitt es el mismo que hemos visto tantas veces. Un tipo que huye de su pasado pero que se ve obligado a volver al mismo para salvar a su familia, (y ya de paso a la humanidad, ¿por qué no?) Y otro tanto se puede decir del resto de personajes que pululan por el film sin implicarse mas que lo estrictamente necesario para sacar adelante cada escena como si de las diferentes pantallas de un video juego se tratara. (Sí, tenemos lo que buscas pero hay que atravezar un edificio lleno de zombies, mala suerte)
Eso sí, la buena noticia es que Forster, que sabe rodar como nadie, está al mando, y sabe imponer un ritmo impecable, dejando, ademas, algunos momentos realmente buenos (Muchos de ellos, supongo que ya estarían en la novela, como suele ocurrir en estos casos), aunque la sensación final es de haber pasado simplemente un rato entretenido y poco más.
Buen director pero aún así ¿zombies?, no, gracias
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