Saturday, February 23, 2019

7 ocasiones en la que los oscars fueron crueles sin necesidad

Hola amiguitos

Este fin de semana se entregan los oscars. Y pensando en lo injusto que me parece que una película mediocre como Black Panther, esté nominada a mejor film del año, cuando una obra maestra como El caballero oscuro no lo estuvo, me he puesto a repasar mentalmente las muchas injusticias que se han vivido en los oscars a lo largo de los años. Lo cual, cuando se trata de un premio que se concede por votación , es inevitable. Otra cosa es la crueldad que, a veces, conlleva algunas de las decisiones tomadas por la academia... y que sí que podría haberse evitado. Repasemos algunas de las veces en que la academia fue innecesariamente cruel :



1- Lauren Bacall

Bacall fue una de las grandes estrellas del Hollywood clásico. Eterna compañera de Bogart, en la vida y en múltiples películas, su paso por la historia del cine no fue, ni mucho menor. Sin embargo, nunca había sido nominada al oscar. Así que cuando en 1997 fue nominada por "El amor tiene dos caras" nadie dudó de que se llevaría el premio a casa, al igual que otros clásicos, (y menos clásicos que ella, de hecho), habían hecho antes, con papeles menores, pero en claro reconocimiento a toda una carrera. Jack Palance, Christopher Plummer o el propio Sean Connery, sin ir mas lejos.... Pero no en el caso de la buena de Lauren. Ya que la que tenía que haber sido su gran noche, fue, al final, la de "El paciente inglés", que se llevó 9 estatuillas a casa, incluyendo una para la gran actriz Juliette Binoche. algo totalmente justo si atendemos a la calidad de las interpretaciones de una y de otra, pero absolutamente cruel con una gran estrella que, muy probablemente, ni siquiera soñaba con poner el broche de oro a su larga carrera con un oscar, hasta que esta inesperada nominación llegó. ¿Qué necesidad había de ponerle la miel en los labios?


 La cara de Binoche lo dice todo...


2 - Barbra Streissand


Hablando de "El amor tiene dos caras", su directora y protagonista, Streissand no es, precisamente, una olvidada por la academia. Barbra tiene dos merecido oscars por su gran actuación en "Funny Girl" y otro como compositora de la canción "Evergreen" de "Ha nacido una estrella". Sin embargo, nunca ha sido reconocida como directora, a pesar de haber hecho una notable labor en este campo, con "Yentl" y, sobre todo, "El príncipe de las mareas". Ni una mala nominación le fue otorgada, aun cuando esta última compitió por el premio a mejor película en 1992. Aun así, Streissand ha sido siempre un símbolo en lo que se refiere a la labor de las mujeres como directoras. En un tiempo en el que esto no era nada habitual, ella se impuso a las trabas que le llegaban desde los estudios, y sacó adelante proyectos de cierta envergadura. Por eso parece un detalle un poco cruel, y desde luego innecesario, pedirle que entregara el oscar de mejor dirección de 2010, que ya se intuía que sería el primero para una mujer. Kathryn Bigelow. Alguno lo puede disfrazar de homenaje, si quiere, pero la realidad es que la academia, en mi opinión, tuvo muy poco tacto... Barbra, por supuesto, aceptó entregarlo. Faltaría más.

Encima es mas alta que yo...

3 - Sylvester Stallone

Lo que hicieron con Sly no tiene nombre. Aguantando durante años todo tipo de comentarios hirientes sobre sus dotes interpretativas, premios Razzies al peor actor del año e incluso de la década, chistes a costa de su persona, y de repente... una luz al final del túnel. Cuando el hombre ya se había acostumbrado a no recibir mas reconocimiento que su enorme fama y el cariño de sus fans, (que no es poco), a la crítica le da por destacar de forma vehemente su enésima interpretación de Rocky Balboa. Sí, la misma que ha hecho y ha clavado siempre, las cosas como son. Solo que esta vez, es como secundario, mas viejo y mas cascado. Y de la noche a la mañana se encuentra de nuevo a las puertas del oscar con su querido y carismático personaje de boxeador, por el que ya fuera nominado, cuarenta años antes. ¿Y todo para qué? Para darle, en el último momento, despues de haber ganado él todos los premios posibles, el oscar a Mark Rylace por "El puente de los espías". Un acto de crueldad infinita. Y absolutamente innecesario.

Mira que me había puesto hasta gafas. Pues no lo vi venir...

4 -  Ben Affleck


No es que Ben Affleck pueda quejarse mucho de los oscars. Para el poco prestigio que tiene como actor ya acumula dos estatuillas en otras categorías. Una por el guión de el indomable Will Hunting y otro como productor de Argo. Pero es precisamente con esta película con la que la academia fue especialmente cruel con él, pues siendo nombrada la mejor del año, no vio a su director, Affleck, nominado si quiera. Como si la calidad de la cinta nada tuviera que ver con el trabajo de Ben. Nada más lejos de la realidad, por cierto.


Este Affleck no, este es el bueno.


5 - Steven Spielberg


Es verdad que el mítico director de ET, tiene tres oscars de 17 nominaciones, lo que no es para estar quejoso. Pero hubo un tiempo en que a la academia parecía divertirle ningunearle. Sobre todo el año de El color púrpura que se fue de vacío a casa a pesar de sus 11 nominaciones y de ser, claramente, la mejor película del año, con las mejores interpretaciones. El bueno de Steven, en el colmo del menosprecio, no fue ni nominado...


Así de grande es el mojón que nos vamo a comé este año, Whoopi…


6 - Jorge Drexler


Corría el año 2005 cuando los organizadores de la ceremonia consideraron que uno de los nominados a mejor canción, Jorge Drexler, no era suficientemente famoso para cantar su propia canción en la gala, por lo que se encargó a Antonio Banderas que la interpretara. Drexler aguantó aquella humillación con toda la elegancia del mundo hasta que se anunció al ganador, que no fue otro que él. En lugar de dar un emotivo discurso, el cantante uruguayo aprovechó esos minutos que la academia no tuvo más remedio que concederle, para cantar un pasaje de su canción. ¿Qué necesidad había de negarle el crédito que se había ganado con su nominación?




 7 - Leo Di Caprio


Lo de Leo con los oscars es mas o menos parecido a lo de Leo con el público. Hace 20 años no le caía bien a nadie y hoy todos lo adoran. Su esfuerzo y talento han logrado ese cambio. Pero no debemos olvidar que hubo un tiempo en que la academia no estaba dispuesta a ponérselo fácil, ignorando grandes interpretaciones como la de Atrápalo si puedes o nominándolo por trabajos discretos como el de diamante de sangre en lugar de por Infiltrado, mermando así sus posibilidades de ganar el premio. Pero el mayor acto de crueldad tuvo lugar el año de Titanic, cuando nominaron hasta al tío que llevaba los bocadillos pero no a él... ¿Qué trabajo costaba después de darle 14 nominaciones, haber echao una más pal chiquillo? ¡Si el hombre lo dio todo por el film, joé, que en esa tabla cabían los dos, leche!




Sí, dormío está... Cuando te conviene, eres tonta.

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