Tuesday, November 19, 2013

"Malavita" El enésimo "Pudo haber sido y no fue"

Dicen que Scorsese decidió producir esta película porque cuando leyó el guión le hizo gracia un chiste en el que se le mencionaba. El chiste en cuestión es que el protagonista, un mafioso acogido al programa de protección de testigos, escondido junto a su familia en Normandia, es invitado a un cineforum en el que se proyecta "Uno de los nuestros". El "colmo" del chiste es que el actor que interpreta al mafioso es el propio De Niro en persona. Y el problema de todo esto es que nadie, jamás, nunca, y bajo ningún concepto, debería hacer una película solo porque le hace gracia un chiste. Y eso se nota en el resultado final de esta.

En parte porque al director, Luc Besson, autor bastante personal y de gran brío escénico, tambien debió hacerle gracia eso de poner a De Niro a parodiarse a sí mismo, como si no lo hubiera hecho ya lo suficiente, y con una historia y resultados mucho mejores en "Una terapia peligrosa", y en parte, porque lo que mejor funciona en esta, es todo lo que no tiene nada que ver con ese chiste y con el propio De Niro, que, por otra parte, esta perfecto en su papel. Cosa que no siempre se puede decir de Bobby, lo siento.

"Malavita", cuyo título original es "The family", y se basa en una novela, que probablemente tenía más gracia que la peli, presenta, de entrada, un planteamiento poco original, (a mí me recuerda mucho a una peli de Steve Martin, llamada "My blue heaven", por cierto), con una familia de la mafia que estropea de forma sistemática todas y cada una de las tapaderas que la CIA le proporciona, por culpa de su incapacidad para adpatarse a cualquier entorno en el que las cosas no se resuelvan a base de estafas, mamporros y amenazas. Esto es, precisamente lo que proporciona, gracias al buen hacer de los actores y el innegable pulso de Besson para mezclar la violencia y el humor, los mejores momentos del film, mientras vemos a la familia del mafioso, con una magnífica Michelle Pfeiffer a la cabeza, dando palizas, quemando establecimientos, y, en el caso del hijo, implantando el crimen organizado en el instituto local.

El problema, como ya digo, es todo lo demás. Esos mafiosos, cargados de clichés, que buscan venganza, esos agentes de vigilancia que están ahí para que los maten, como siempre, ese papel ultramanido del totalmente desganado Tommy Lee Jones, que no sonríe desde el 2004, y, por supuesto, la estupidez esa del cineforum... aburrido, previsible y absurdo. (¿Cuando dejaremos de ver esas escenas en las que alguien machaca a alguien que le está tocando las narices, para descubrir, oh sorpresa, un instante despues, que solo se lo estaba imaginando?)

Aun así, como suele ocurrir con los cineastas imaginativos como Luc Besson, la película está rodada con buen gusto, excelente montaje y es rica visual y sonoramente. Ese momento del desembarco de los mafiosos en el pueblo mientras suena el "Clint Eastwood" de Gorillaz, es, sencillamente, genial.

Por eso da mas rabia, por enésima vez, que sea un "Pudo haber sido y no fue"



No comments:

Post a Comment