1 – Decir “que me mato” cuando tropiezas
A
ver, si tropiezas cuando vas bajando una escalera, imposible no es que
te mates. Pero decirlo cuando simplemente das un pequeño traspiés en
llano... A lo mejor es abusa, ¿no?
2 – Decir “voy a reventar” cuando has comido mucho
¿Nos apartamos por si acaso?
3- Decir “que me come” cuando te ataca un perrillo
¿En serio?
Date por devorado...
4- Decir “como te coja te mato” cuando nos enfadamos con alguien.
Y el día que te ofendan a base de bien, ¿qué harás? ¿Destruir el planeta?
5- Decir “iba revoleao” cuando alguien va muy rápido.
O sea, que alguien lo ha cogido y lo ha revoleao. En plan gran héroe americano, ¿no?
6 – Decir “Me he dao la vuelta” cuando hace uno de vientre a base de bien.
Lo de dentro pafuera y lo de fuera padentro, vamos. Qué poderío, ompare.
7 – Decir, “está helada”, cuando te ponen la comida fría.
Vamos, que no puedes ni clavar el tenedor… Un bloque de hielo es el filete.
8 – Decir “Me entraron ganas de arrancarme el brazo” cuando hablamos de lo que nos dolía el mismo.
¿Tengo que creerme que llegaste a considerar tal posibilidad? ¿En serio?
9 – Decir “A mí me pasa eso y me muero”
Pues sí que te mueres tú fácil.
10 – Decir “Ese no ha dicho una verdad en su puta vida”
Hombre, alguna habrá dicho… Aunque sea una.
Bueno, este puede que no haya dicho nunca ninguna...
No comments:
Post a Comment