El show de Lucia Etxebarría en "campamento de verano"

Que cuando uno necesita pasta, haga lo que esté en su mano para conseguirla, dentro de un orden, es algo que no se puede ni discutir, ni mucho menos juzgar. Por eso, aunque a mas de uno le espante que alguien que tiene un premio nadal, un planeta y no se cuantos más, participe en un reality, para mí está mas que justificado. Partiendo de esto, tambien es cierto que hay que saber donde se mete uno.

Lucia Etxbarría, persona particular donde las haya, decidió unirse al circo para saldar sus deudas con hacienda, según ha dicho ella misma. Pero no ha tenido mucha suerte con el show que le ha tocado. El campamento este de verano, es, como todos los programas de verano, un reality de segunda división, con concursantes de segunda división y presentadores de tercera, que se enganchan constantemente con los participantes en discusiones absurdas, se atascan y no saben por dónde tirar la mitad de las veces. A la chica esta que se tiraba a la piscina, y al Escasi, de paso, se le nota que la cosa le sobrepasa. No todo el mundo está preparado para lidiar con ciertos especímenes en directo.

Si a esto le unimos que el grupo de concursantes elegidos son de los de ir a hacer sangre, era cuestión de tiempo que la escritora terminara convirtiéndose en el blanco preferido de todas las movidas. Y ante eso, solo se puede hacer lo que ella está haciendo. Llorar por los rincones y amagar con irse. Yo no creo que Lucía sea tan víctima como pretende ni tan estratega como le achacan sus detractores, que, por cierto, son todos los demás concursantes, entre los que se encuentran ejemplares tan apreciables como Karmele Marchante, especialista en echar gasolina al fuego, la concejala del video erótico, que no se pierde una, el gallego de un príncipe para Corina, que ha decidido convertirse en el tarado nacional, y hace bien porque igual en la nasa no lo contratan, (sus momentos de gloria pasan por ser acusado de prácticas onanistas en la oscuridad del dormitorio común, o cargarse una cama tras revolearse en ella, porque ya digo que el chico no tiene maneras de princesa Disney) y un par de energúmenos de pelo extraño y verbo confuso que en medio de estos berenjenales se encuentran como peces en el agua. Demasié para alguien tan peculiar y bohemio como la Etxebarría que ayer confesaba que se había equivocado y que no era lo suficientemente fuerte para esto. Y yo creo que es verdad. Lista debe ser como ella sola, pero en esto se ha equivocado. Una persona con una hija que alimentar y unas deudas que pagar puede dilapidar su pasado pero nunca su futuro. Perder el prestigio como escritora es asumible en tiempos de crisis pero si pierde la dignidad como persona la cosa ya va a ser mas chunga. Cierto que no escribe hace tiempo bajo la excusa de protestar contra la piratería pero siempre hay alternativas para una pluma ágil. Ahora, tras el espectáculo que está dando, su alternativa está en sálvames y similares.

No sé si su sufrimiento es fingido o no, pero que se ha equivocado, se ha equivocado.

La gran protagonista, sin lugar a dudas, del programa.