Poco sentido le vi yo a este especial de navideño que hacía difícil no acordarse del fiasco que fue hace años, en una galaxia no tan lejana, el especial de navidad de Star Wars. No se imagina uno que los personajes de esta saga, que están bastante machacados por los acontecimientos vividos en la guerra del infinito, estén para shows navideños, pero si James Gunn está detrás del asunto, como minimo, hay que darle una oportunidad.
El especial, que dura unos 45 minutos, que se pasan volando, por cierto, cuenta una historia corta acerca de cómo Mantis y Drax intentan animar a Quill, durante las navidades, que el hombre no celebra desde que abandonara la tierra. No voy a destripar más porque hay gente a la que le parece un spoiler hasta que le digas que Tiburón transcurre en la costa. Pero sí voy a decir que el especial es ameno, gracioso a ratos y antes de que empiece a aburrir, se acaba. Aunque da la sensación de que podía habérsele sacado más jugo a la historia y a la vis cómica, que es mucha, de los personajes principales, que normalmente suelen servir solo de comparsa.
Algo que no me ha gustado nada es que Groot, supongo que porque era muy caro crearlo con CGI, es un señor con un traje de goma. Y la verdad, cada vez que sale me da la sensación de estar viendo una representación de un parque de atracciones en lugar de un buen producto marvel. No puedo evitar que eso me moleste mucho.
Entretenida sin más.
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